Ella caminaba sin rumbo fijo,
el la esperaba en algún lugar de la tierra.
Eran como dos almas gemelas
tratando de encontrarse en medio del vasto océano:
lleno de inseguridades y cosas desconocidas.
Eran como un par de lagrimas
esperando unirse en la cúspide de su caída.
Como dos soledades reprimiendo su atracción.
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